Estos dispositivos instalados cerca
de las salidas de los baños, cocinas
o las salas de juntas, contienen
botones que permiten informar
carencias específicas tales como:
papel higiénico, jabón de manos o
problemas como un inodoro sucio,
olor desagradable, charcos en
cualquier lugar del suelo, etc.
Instalados en cestos de basura,
recipientes de gel líquido o
dispensadores de papel, que indican
con precisión el nivel de existencias.
Cuando éstas comienzan a
agotarse, el sistema alerta con
anticipación para poder reponerlas a
tiempo.
Cuenta el número de entradas al baño, con una
precisión del 98%, mediante tecnología láser.
El medidor se comunica con los sensores de consumibles
mediante bluetooth e incluye un lector a distancia
para identificar la etiqueta de un trabajador cuando entra.